Tú fuiste despreciado, desechado entre los hombres aquí.
Tú llevaste mi dolor y cargaste mis pecados en la cruz
Pero eso no importó, yo no entiendo cómo pudo más
Tu gran amor que la razón.
Por eso ahora sano soy por Tu llaga, por Tu gracia, por Tu amor.
Me has dado paz y nueva vida y Tu bendición.
Ya no hay heridas, me has dado vida, Jesús.
He aquí que mi alma sacias
y das vida a mi vida.
Eres quien trae la paz a mi ser.
Oh Jesús, te agradezco.
Gracias Señor Jesucristo, siendo Dios y Rey, viniste entre los hombres y te entregaste por la humanidad, por nuestro pecado, por todas nuestras imperfecciones, por todo lo que en nuestro corazón hacia que viviéramos lejos de nuestro Padre...
Es tu sangre el medicamento más efectivo contra todo mal, enfermedad, no hay otro elemento que pueda limpiar un corazón corrompido, una mente tergiversada por la mentira, no hay otro Camino que tu sangre para conocer el verdadero amor, el real, tu amor que echa fuera todo temor, tu amor que produce la fe para mover montañas.
Padre, cuán hermoso es tu corazón, llévame a conocer las profundidades de ese inmenso amor, que es tan alto, tan ancho, tan profundo y tan largo...
Atráeme a ti con tu Espíritu, jálame tan fuerte que nada quede de impurezas, de oscuridad, de soberbia, de rebelión, Oh Señor que mi corazón se vuelva como tú lo has pensado desde antes de la fundación del mundo, un corazón pleno para ti, amarte con toda mi mente, mi alma, mis fuerzas...con todo mi corazón.
Gracias Señor...Digno eres, te adoro mi Rey y mi Señor...
Dios dió, Dios quitó, en todo sea su nombre bendito.
¡Bendito seas, Señor!
¡Sea exaltado tu glorioso *nombre,
que está por encima de toda bendición y alabanza!
2 comentarios:
ingrid : como simpre en un mismo espíritu, cada palabra refleja mi pensar en este tiempo, instante, como siempre traduces mi espíritu, como siempre querida y amada hija, porque tan lejos.porque
Amada, lejos en distancia física pero en el mismo Espíritu, no estamos solas, él ha determinado unir a su Iglesia y nada puede destruir esta unión, nada. Bendiciones
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